lunes, mayo 29, 2006

¿QUIÉN ESTÁ DETRÁS DE LOS DISTURBIOS EN KATMANDÚ?


Bueno, bueno, bueno, cómo anda Katmandú.

Esta semana por culpa de una negligencia médica Katmandú fue, una vez más, bloqueada por manifestantes. Resulta que en un hospital privado se les olvidó traer la bombona de oxigeno al quirófano donde operaban a un anciano. El hijo del anciano llamó la atención del médico, éste pidió a la secretaria que la trajera pero ella estaba ocupada hablando por teléfono, así que le pidió al guarda de seguridad que lo hiciera. El guarda, que no sabe de bombonas porque obviamente ese no es su trabajo, trajo una bombona de oxigeno vacía. El anciano murió.

Hay un aspecto de esta historia que dice mucho sobre la sociedad nepalí. Eso de que el médico mande a un subordinado, el subordinado a otro y así hasta que la orden llega al ultimo pringado es muy típico. La sociedad nepalí está muy jerarquizada y estratificada en castas. El trabajo en la cosmovisión hindú es considerado algo mundano propio de las castas bajas. Por eso las élites nepalesas, ya sea en puestos de poder, en el gobierno o en la empresa privada, no hacen ni hostias...

En cualquier caso, el hijo llama a su familia, su familia a sus amigos, sus amigos a otros y se monta un pollo tal enfrente del hospital, que el médico acaba en otro hospital de las hostias que se ha comido del hijo, su familia, los amigos y los otros amigos. El hospital se cierra. Pero la cosa no acaba aquí...

De un día para otro se han extendido las algaradas y, prácticamente, todos los accesos a Katmandú aparecen bloqueados por manifestantes. En declaraciones a la prensa el hijo dice que no conoce a nadie de los que ahora (o sea, al día siguiente de que su padre falleciera,) se están manifestando por todo Katmandú. ¿Qué ha pasado?

La respuesta que recibo de mis compañeros de trabajo es que los maoístas están detrás de todo esto. En principio tomo esta respuesta con pinzas. Mis compañeros, como el resto de nepalíes que trabajan en la industria más boyante de Nepal, la cooperación internacional, son todos de castas altas y, en general, no albergan muchas simpatías por los maos. ¿Qué coño tienen los maos que ganar de una negligencia medica? pienso yo. Absolutamente nada.

Dos días después un taxista es apaleado por un policía. Ese mismo día, nuevamente, los principales accesos a Katmandú aparecen cortados. ¿Qué esta pasando?

Ya he comentado en anteriores ocasiones cómo los maoístas desde el principio de la revuelta popular de Abril trajeron muchos cuadros políticos a Katmandú. Aunque minoritarios estos cuadros jugaban un papel fundamental: incitar a las masas a liarla. Y desde Abril a la menor oportunidad estos cuadros, al calor de las masas, la lían parda.

Tiene sentido que los maoístas estén siguiendo esta estrategia. Si desean que la alianza de los 7 partidos avance en los compromisos que tenían acordados antes del derrocamiento del rey están obligados a ejercer presión. Si no lo hacen, conociendo a estos partidos, se pueden pasar meses peleándose entre ellos por un ministerio y ni ponen fecha para las elecciones ni avanzan en el proceso de paz ni nada de nada. Así que los maos, al menor indicio de descontento social, lo capitalizan.

Es por esto que, de una orden genérica del comité central, algo así como: “Potenciar el descontento popular allí donde aparezca. Mantened Katmandú ingobernable hasta que el parlamento cumpla con sus compromisos” a su aplicación práctica sobre el terreno, salen cosas como éstas, aparentemente inexplicables, que convierten una trágica pero cotidiana negligencia médica en primera plana de los periódicos de Katmandú.

En fin, que sí parece y tiene sentido que sean los maos los que están detrás de todos estos incidentes.
Foto: Puspa Kamal Dahal "Prachanda". El lider del movimiento maoista.

viernes, mayo 19, 2006

DECISION HISTORICA EN EL PARLAMENTO DE NEPAL


El pasado jueves, finalmente, el parlamento aprobó por unanimidad un decreto que pasara a la historia como el primer paso en la refundación del estado nepalí.

Entre otras cosas, el decreto establece:

Foto: El Rey Gyanendra
La disminución en la contribución publica para la manutención de la familia real.
Hasta ahora la familia real recibía más de 6 millones de euros anuales de las arcas del empobrecido estado nepalí (10 veces mas de lo que recibe el presidente de los EEUU).

La familia real pagara impuestos como cualquier otro ciudadano.
Hasta ahora no pagaban impuestos.

La familia real podrá ser llevada ante los tribunales
Hasta ahora no podían ser juzgados. El hijo de Gyanendra, el príncipe y futuro heredero, Paras, es famoso por haber asesinado a varios ciudadanos nepalíes. Uno de ellos, Prabin Gurung, un famoso músico nepalí, murió atropellado por el príncipe. Aunque obviamente la ley no puede ser retroactiva, a partir de ahora, Paras (y el resto de la familia real) se pensara dos veces antes de atropellar o sacar su pistola en una discoteca (lo de sacar la pistola en discotecas es otra de sus famosas y recurrentes hazañas).

El Rey ya no podrá elegir a su heredero
Este punto no es que tenga gran trascendencia pero todos sabemos a quien va dirigido. Paras: ¡Nunca jamás serás coronado rey de Nepal!

FOTO: Paras.
El Rey ya no ostentara el cargo de comandante supremo de las fuerzas armadas
Este es el punto más importante de la declaración en realpolitiks ya que desarma al rey de cualquier poder real sobre el estado nepalí. Sin el control de las fuerzas armadas, este y los siguientes reyes de Nepal, ya no podrán orquestar ningún golpe de estado. Solo les quedara patalear. En cualquier caso, habrá que estar atentos a las reacciones del ejército que siempre ha sido fiel a los intereses y deseos del rey.

Nepal es, a partir de ahora, un estado secular.
Hasta ahora Nepal era el último estado hindú del planeta. Este punto también es importante ya que despoja al rey de otra fuente de poder. Muchos nepalíes –todavía hoy- consideran que el rey de Nepal es la reencarnación de Vishnú.

El Rey ya no podrá disolver el parlamento.
Hasta ahora no estaba claro en la constitución nepalí si podía o no. La mayor parte de los expertos nepalíes consideraron que no podía disolver el parlamento sin el acuerdo previo del primer ministro. Ya poco importa. A partir de ahora, el rey ha sido reducido a una figura simbólica carente de poder real.

Esta declaración debió haber sido aprobada el martes. Aduciendo la necesidad de nombrar primero al resto de ministros, el parlamento retraso la declaración. Ese mismo día, la gente se hecho una vez mas a las calles. En el puente que separa Kathmandu de Lalitpur, cinco coches del gobierno fueron quemados por los manifestantes. Otros incidentes se registraron por todo el país.

El Jana Andolan, el movimiento popular nepalí, es el mayor garante de las aspiraciones del pueblo nepalí. Desde que se restauro el parlamento, en cuanto éste se desvía un ápice del camino que el movimiento ha marcado, las manifestaciones e incidentes se suceden. Detrás de estos incidentes están, entre otros, cuadros políticos maoístas y los sectores más conscientes y progresistas de la sociedad nepalí. Aunque minoritarios, son, y nunca mejor dicho, la chispa que enciende la mayor parte de los incidentes.

Tras esta declaración, comienza oficialmente la tan necesitada refundación del estado de Nepal.

jueves, mayo 18, 2006

¿QUE QUÉ HACIAMOS LOS INTERNACIONALES DURANTE EL TOQUE DE QUEDA EN KATHMANDU?

Pues que vamos a hacer... el chorra. A pesar de que ahi fuera las porras eran de verdad. Pues como en Tolosa, ¿Verdad?, unos de Jaia y los otros de Borrroka.


martes, mayo 09, 2006

LANGTANG TREK. 4,600M MÁS CERCA DEL CIELO


Langtang se encuentra en la región Central de Nepal, a unas 8 horas en Jeep desde Katmandú dirección Norte. Comenzamos en Dunche, a unos 2,000m de altitud. En dos días alcanzamos el paso de Langtang a 4,600m. Las tomas de videos pertenecen al segundo día, justo antes de alcanzar la cima.

La zona esta habitada mayoritariamente por tamangs y en menor medida por Serpas. Los Tamangs representan el 4% de la población nepalesa. Se cree que llegaron a sus actuales zonas de residencia hace unos 3,000 años, provenientes del altiplano tibetano.


El pueblo tamang mantuvo una estructura política independiente hasta finales del siglo XVIII. Con la unificación de Nepal, los tamangs fueron excluidos de los puestos de gobierno y se les prohibió aceptar empleo en el extranjero hasta 1950.


De acuerdo con el código civil de 1856, el pueblo tamang fue adscrito a la casta de los Shudra, (la segunda casta más baja en el sistema de Varna Hindú). Pertenecer a esta casta significaba que podían ser asesinados o esclavizados por las castas altas. Esta situación continuó hasta la introducción del nuevo código civil en 1962. En la actualidad, los tamangs siguen siendo discriminados por las elites gobernantes.


Los tamangs practican una forma de budismo tibetano y hablan una lengua sino-tibetana. En la actualidad alrededor de 600.000 personas hablan este idioma.

Foto: Un tamang que me encontre en el camino

jueves, mayo 04, 2006

TRES SEMANAS DE «JANAANDOLAN»

Ayer se cumplían tres semanas de Banda, de huelga general. El lunes, mientras esperábamos el nuevo pronunciamiento real, las opiniones iban desde la declaración del estado de emergencia o la concesión de alguna de las demandas del Janaandolan, del movimiento (o poder) popular.

Cerca de la medianoche del lunes, el rey concedía la reinstauración del Parlamento que él mismo disolvió. Esta concesión ha logrado dividir la alianza de los siete partidos políticos con los maoístas. Mientras los primeros han optado por dar por finalizada la huelga al considerar que la reinstauración del Parlamento les permitirá redactar una nueva constitución, los maoístas han calificado esta decisión de error histórico y de traición al pueblo. Consecuentemente, el Comité Central del Partido Comunista de Nepal (Maoísta) ha declarado que continuará con el bloqueo de la capital y las principales vías del país hasta que se garantice la creación de una Asamblea Constituyente.

Las marchas convocadas para ayer fueron secundadas de forma multitudinaria. Por la mañana, decenas de miles de manifestantes se congregaron en diferentes puntos del Ring Road, la carretera que rodea Katmandú, y luego se dirigieron hacia Ratna Park, un céntrico parque cercano al Palacio Real. Una monitora de derechos humanos me comentaba que el sentir de los manifestantes está dividido entre los que celebran la restauración del Parlamento y los que protestan por haber aceptado esa concesión.

Hay que tener en cuenta que lo que comenzó como una movilización convocada por la alianza de los partidos y el movimiento insurgente, se convirtió en un auténtico movimiento popular de masas que desborda la base social de ambos. Y esto ha asustado a la monarquía, a los partidos políticos y a la comunidad internacional. Todos ellos desean una transición ordenada y controlada ya que tienen demasiados intereses que conservar. En este momento es difícil de predecir la reacción de una parte importante del Janaandolan y sus nuevos líderes, la mayoría dirigentes del movimiento estudiantil. Gagan Thapa, el más conocido de todos ellos, ha declarado que esto es sólo un primer paso y que no se van a conformar con nada que no sea la creación de la república.

El Palacio sigue acordonado por alambres de espinos, tanques, tanquetas y un fuerte dispositivo policial y militar. El pasado domingo, los manifestantes se quedaron a escasos dos kilómetros del Palacio Real, del centro simbólico del poder. La historia se ha vuelto a repetir. Gyanendra, el rey que se otorgó poder absoluto sobre Nepal, acabó ­como su padre 16 años atrás­ prisionero del Janaandolan, del poder popular.

Todos contra el rey

Han sido tres semanas extrañas, llenas de rumores, donde los únicos temas de conversación entre los nepalíes eran la actual situación política, la escasez de productos de primera necesidad y la desproporcionada subida de los precios. La suspensión de toda actividad económica dio lugar a una solidaridad atípica. Al calor de familia- res y amigos, los nepalíes han pasado los días pegados a la radio, socializando sus opiniones, temores y esperanzas; ofreciendo agua a los manifestantes, escondiendo manifestantes en sus casas o participando ellos mismos en las manifestaciones desafiando el toque de queda.

Asistimos al final de un episodio, quizás el único que vuelva a alcanzar las primeras páginas de la prensa occidental, pero esto no se acaba aquí, todavía quedan muchas incógnitas por resolver. La composición de la Asamblea Constituyente y el procedimiento para redactar la nueva constitución serán algunas de las tareas más complicadas de abordar, y condición necesaria para mantener vivos los acuerdos entre los partidos políticos y los insurgentes maoístas. Si se rompen estos acuerdos, el tan ansiado proceso de paz difícilmente podrá ser llevado a buen término, frustrando las aspiraciones del pueblo nepalí: paz y democracia.

(Publicado en Gara el 26/04/06)