jueves, enero 11, 2007

La Encrucijada Nepalí: Algunos obstáculos para la paz (2/2)

(publicado en Setmanari la Directa)
La realidad sobre el terreno: Reclutamientos y el problema de los Cantones

Muchos de los acuerdos no están siendo implementados. Que no se cumplan los plazos es algo muy normal en Nepal. Ni el gobierno cumple con sus plazos, ni el que te trae la bombona de butano a casa lo hace. Los retrasos no reflejan una falta de voluntad política, es más bien una cuestión cultural. Así que nadie espere que las elecciones se celebren en Junio o que se libere a todos los presos de ambos lados en los próximos días. Lo importante en este sentido es que se den pasos hacia la celebración de las elecciones, la liberación de los presos por ambas partes o el acantonamiento de ambos actores armados. Y eso, poquito a poco, sí parece que este sucediendo.

Desafortunadamente, ambos actores armados continúan reclutando. En el caso del ejército de Nepal hay que tener en cuenta que, históricamente, es una institución muy cercana al rey y nunca ha estado sometida a un claro control civil. El Ministerio de Defensa nepalí consta de 8 empleados, no os digo más. El ejército de Nepal es un estado dentro de otro estado. Permítanme ilustrar este punto con una anécdota. Hace unos meses, un coronel del ejército, bastante bebido, comenzó a increpar a unos travestís a la entrada de Thamel (un barrio de Kathmandu). Una patrulla de policía, al ver el alboroto que estaba causando un ciudadano bebido y agresivo, se para y lo detiene. En comisaría, una vez que descubren la identidad del detenido, lo ponen inmediatamente en libertad. El coronel regresa a su cuartel, toma media docena de soldados y regresa a la comisaría. Allí, exige que le entreguen a los 3 componentes de la patrulla de policía que le detuvo. Se los dan, se los lleva al cuartel y allí son torturados. En otras palabras, el gobierno no tiene poder para controlar al ejército y esto es extremadamente preocupante. En cualquier caso, aunque todo indica que el ejército sigue reclutando, de momento, se mantienen formales dentro de los cuarteles. Esperemos que no nos den ningún disgusto.
king army
Foto: Ejercito de Nepal.
El EPN, por su parte, también sigue reclutando. Según ellos tienen unos 35.000 combatientes. Otras fuentes estiman que la cifra real rondaría los 20.000. Por la propia estructura del movimiento, la división entre civiles y combatientes no es muy clara. Ahora que el movimiento se transforma de una estructura centrada en la guerra popular a una estructura centrada en la próxima cita electoral, los combatientes mejor capacitados para hacer política, es decir, sus mejores cuadros, son necesarios en la calle, no encerrados en los cantones. Ambas razones, aumentar sus números y mantener a sus mejores cuadros en la calle, podrían explicar por qué el EPN sigue reclutando cuando todo apunta a que el Acuerdo de Paz es definitivo y que la guerra popular ha terminado.

Las Naciones Unidas deben supervisar que los combatientes ingresen en los cantones pero, ¿como pueden determinar si un combatiente fue reclutado hace dos semanas y no hace dos años? ¿Como pueden establecer quien es del EPN y quien es del PCN-M si no existe ningún tipo de registro al tratarse de organizaciones clandestinas? Hasta determinar la edad de los combatientes es un problema. En principio solo ingresarán combatientes mayores de 18 años. Desafortunadamente, muchos nepaleses y nepalesas no tienen siquiera partida de nacimiento.

El gobierno se ha comprometido a sufragar los gastos de los cantones. Así que poneros a temblar porque donde dije digo, digo Diego y los maoístas se mueren de frío e inanición porque los suministros no llegaron a tiempo. ¿No me creen? Pues ya esta pasando. Hace unos días los periódicos se hacían eco de las pésimas condiciones en las que están los maoístas en los cantones. Un comandante maoísta, diagnosticado con principio de congelación, fue trasladado de urgencia a la capital la semana pasada. No es falta de voluntad política, es que el gobierno de Nepal es incapaz de implementar nada a tiempo, ya sea un programa de salud o los suministros a los cantones.

Finalmente, la comunidad internacional está poniendo mucho énfasis en garantizar que los comicios sean realmente libres; por eso la importancia de que ambos actores armados se mantengan quietecitos en los cantones. Pero en ninguna parte del acuerdo se hace referencia a las milicias maoístas o al papel que desempeñará la policía armada (un cuerpo paramilitar creado específicamente para luchar contra los maoístas). Siendo realistas, a lo máximo que se puede aspirar es a que haya el menor número de coacciones durante los comicios. Para ello, es importante que ambos actores permanezcan recluidos en sus respectivos barracones y que el gobierno de Nepal sea capaz de abastecer los cantones maoístas en condiciones. Ahora bien, coacciones va a ver y por ambas partes. Así ha sido siempre en Nepal, antes y después de que los maoístas tomaran las armas.